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El Posa Brazos

Publicado: 2011-01-31

Sentarse en un bus, un cine, una tribuna de estadio o un avión, implica muchas veces tener que compartir un posa brazos con la persona que se sienta a tu costado.

Cada vez que estoy en esa situación me hago la misma pregunta: ¿Quién debe poner su brazo en el poza brazos, el que está sentado a mi costado o yo?  Parece ser una situación intrascendente pero no deja de ser interesante para el análisis.

Hasta donde sé, no hay ninguna regla de etiqueta sobre el tema por lo que el desenlace de cada situación dependerá de quiénes sean los protagonistas y los códigos tácitos que manejen entre sí.  

Al conchudo habitual poco le interesará quién se siente a su costado y pondrá sus brazos a los dos lodos sin mayor reflexión o problema.  Solo prestará atención a la situación si es que alguien está utilizando los posa brazos antes que él llegue y si este fuera el caso, tratará de imponer la presencia de su brazo en una forma en que al vecino de butaca le quede claro que debe retirar su extremidad.  Si el vecino se descuida, tratará  del robar de inmediato ese pequeño espacio que en determinadas situaciones ayuda a que el cuerpo esté más relajado (porque posas tu brazo) y sobre el que parece no existir ninguna convención social respecto a su uso.

Lo interesante es que si los protagonistas no se conocen, lo más probable es que manifiesten su posición con una especie de actitud corporal (moviendo un poco el brazo, poniéndolo y sacándolo, etc) y no conversando. 

Si le buscamos tres pies al gato, es válido decir que teóricamente los dos vecinos de butaca deberían poder usar los posa brazos la misma cantidad de tiempo.

Que uno haya llegado antes que otro no parece ser un argumento válido si es que ambos pagaron el mismo precio por ocupar su lugar.  Esta no es una situación como la de la cola, en la que sí existe una convención social (muy poco respetada en el Perú por cierto) de que el que llega primero va adelante.  Acá todo depende de cómo reaccionen los vecinos ocasionales.

Si el tiempo de utilización de la butaca es corto (como un viaje en bus dentro de la ciudad) no hay mayor problema ni incomodidad y lo más probable es que se aplique, tácitamente, la regla de que el que llega primero gana.

Pero, si se trata un espectáculo de 2 horas, un viaje en tren de 3 horas o un viaje en avión de 12 horas, debería poder conversarse naturalmente sobre el tema y llegar a alguna especie de acuerdo.

¿Qué tanto habla este compadre sobre cojudeces?  Válido.

Me interesa poder apoyar mis brazos en los posa brazos y me gustaría que la gente sea un poco más directa en ese sentido o en todo caso que se llegue a una convención social sobre su uso.  No debería ser un tema tácito

Nada impide que alguien converse directamente con su vecino ocasional sobre el asunto pero creo que si alguien recibe un planteamiento así en el Perú, se sentiría un poco incómodo y hasta algo ofendido.   

-¿Hola, te parece si tú usas el posa brazos en el primer tiempo y yo en el segundo?

Más allá de la sorpresa inicial, creo que en la mayoría de los casos la respuesta habitual sería que sí.

Entonces, me pregunto por qué si es tan simple hacer una sencilla pregunta (toma 5 segundos) no empezamos a hacerla y nos evitamos exponernos a una situación indefinida, incómoda y un poco absurda, como esta nota. 


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